La vital importancia de las montañas europeas para la población en diferentes aspectos comienza a ser reconocida tanto a nivel institucional como social y económico. Los nuevos desafíos a los que se enfrentan estas zonas y su fragilidad hacen necesario una política común válida y aplicable a todo el territorio comunitario. Un primer paso es una definición y delimitación consensuada en la que ya se está trabajando (Enromontaña, Comisión Europea, etc). En este sentido, el artículo explora las distintas definiciones y las consecuentes políticas de la Europa comunitaria haciendo hincapié en las políticas sectoriales nacionales y subrayando la necesidad de políticas transnacionales para un desarrollo eficaz e integrado para estas zonas que mayoritariamente se localizan en las periferias nacionales constituyendo a su vez la frontera.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados