La Comunidad de Madrid ha avanzado mucho en los últimos 10 años hacia la igualdad entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo, como lo demuestra el que hoy trabajen 61 de cada 100 madrileñas entre 16 y 64 años, cuando en el 95 tan sólo lo hacían 47, gracias a la incorporación a un puesto de trabajo de 609.300 mujeres, o el que las tasas de paro se hayan igualado por primera vez en el segundo trimestre del 95 o que el número de paradas y parados no difieran apenas según la EPA. Las políticas de empleo e igualdad parecen por tanto estar dando sus frutos. Pero al ser la situación de partida de tanta desigualdad, pese al intenso camino recorrido, hoy persisten algunas desigualdades, como las menores tasas de ocupación de las mujeres frente a los hombres.
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