Se considera que la construcción de instalaciones de desalación, de tamaño medio o grande, mediante un sistema modular tiene diversas ventajas técnicas y económicas, que se analizan en el presente artículo.
En la actualidad, se puede afirmar que, de todos los sistemas empleados para desalar agua con elevadas producciones, la ósmosis inversa (O.I.) es el procedimiento más económico, tanto en inversión como consumo energético. De ahí que, cuando se está considerando cómo hacer frente a la incipiente y constante demanda de agua, a la falta de recursos hídricos, se opte por la desalación del agua marina mediante ósmosis inversa, puesto que es la única alternativa que nos garantiza el 100% de nuestras necesidades cuantitativas, ya que, siendo el mar una fuente inagotable de agua, no se depende de las condiciones climáticas, que cada vez son más severas en cuanto al régimen de lluvias.
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