En la batalla de Culloden, los ingleses se impusieron con rotundidad a los escoceses de las tierras altas (los "highlanders"). Así pusieron fin a tres décadas de revueltas jacobitas y al sueño de los estuardo, que pretendían hacerse con los tronos de Escocia e Inglaterra.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados