Con la industrialización, los usos del agua ¿beber, el aseo o el riego¿ se extendieron al desecho de desperdicios, el consumo energético o la limpieza y refrigeración de máquinas, con lo que se ha consumido, malgastado y contaminado más agua de lo que puede ser sostenible
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados