La autora del presente artículo considera brevemente las condiciones externas para el diseño de un sistema de pensiones, así como las tendencias demográficas y las observadas en el mercado de trabajo, que se estiman decisivas. Aborda luego los conceptos básicos, v.g. la asistencia y el seguro sociales, la redistribución y la equidad actuarial. Ofrece a continuación argumentos en el sentido de que la dicotomía "sistema público de reparto versus sistema privado capitalizado" ha atraído una atención desmedida en los recientes debates sobre reforma previsional, pues en realidad tales cambios institucionales no encaran los problemas básicos, en tanto que los aspectos cuantitativos, la relación entre las tasas de cotización y de reemplazo, han sido impropiamente dejados de lado u ocultados por la controversia paradigmática. El siguiente punto crucial es que las nuevas tendencias del mercado de trabajo están haciendo peligrar las formas de seguro de pensiones fundadas en el empleo y ligadas a las ganancias; por lo tanto será preciso buscar nuevas soluciones que garanticen la cobertura de toda la población. Sigue un sucinto alegato a favor de mayor información pertinente y comparativa en materia de pensiones. El artículo concluye con un sumario conciso y una consideración de lo que podría y debiera esperarse de la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento.
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