Las propiedades superficiales de una nanofibra de carbón, obtenida a escala industrial por depósito químico en fase de vapor, fueron modificadas mediante tratamientos de oxidación con C02 y aire a distintas temperaturas. Los experimentos se llevaron a cabo en un horno eléctrico convencional y en un horno microondas, ambos a escala de laboratorio. Usando varias técnicas se evaluó el efecto de la oxidación sobre el contenido en fibra del producto obtenido en el reactor industrial (grado de depuración), así como en la química superficial, textura porosa y carácter grafítico de las fibras resultantes. Se observó que los tratamientos en microondas son ligeramente menos eficaces en cuanto a la depuración del material, sin embargo dan lugar a un mayor ahorro de tiempo, grado de oxidación y carácter grafítico, que los tratamientos equivalentes en el horno eléctrico.
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