El bruxismo grave puede dar lugar a una pérdida importante de tejidos duros dentarios. A menudo la situación inicial se ve agravada por la presencia de trastornos de la oclusión. En tales casos la complejidad y el tipo de rehabilitación dependerán de la gravedad de la enfermedad, de la magnitud de la pérdida de sustancia, del número, y del pronóstico de los dientes existentes, además de la edad, del estado general de salud, de las necesidades y de las posibilidades financieras del paciente. En el presente trabajo se utiliza un caso clínico para ilustrar los pasos terapéuticos que fue necesario seguir en un aumento de dimensión vertical. Se describen en detalle las medidas diagnósticas adoptadas, la exhaustiva elaboración del plan de tratamiento, la fase provisional con alargamiento coronario protésico y quirúrgico y, por último, el tratamiento definitivo. El intercambio interdisciplinario, la inclusión del paciente en el plan de tratamiento y la visualización y prueba de la restauración que se desea lograr con el tratamiennto constituyen, junto con un procedimiento controlado paso a paso, los factores clave para el éxito terapéutico. Esto permite llevar a cabo el tratamiento sin presiones y cumplir con las expectativas del paciente con un resultado predecible.
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