Resumen de Las especies endémicas de coleópteros y heterópteros acuáticos de la provincia de Albacete
Pedro Abellán Ródenas, David Sánchez Fernández, Andrés Millán Sánchez, Jose Luís Moreno Ortego, Josefa Velasco García
De las 293 especies de coleópteros y heterópteros acuáticos encontradas en la provincia de Albacete, 34 han resultado ser endémicas para la península Ibérica. De ellas, 32 corresponden a coleópteros y 2 a heterópteros.
Se han distinguido diferentes tipos de endemismos, según su distribución ibérica:
1) No estrictos. Aquellas especies que tienen una distribución que excede levemente los límites ibéricos. Todos son coleópteros: Stictonectes epipleuricus, Agabus ramblae, Hydraena brachymera, Hydraena carbonaria, Hydraena quilisi, Hydraena atrata, Oulimnius tuber- culatus perezi.
2) Generales. Con un rango de distribución amplio en la península Ibérica. Todas, excepto Aphelocheirus murcius, son coleópteros: Graptodytes castilianus, Nebrioporus bucheti cazorlensis, Nebrio po rus baeticus, Helophorus seidlitzii, Hydraena exasperata, Hydraena affusa, Hydraena unca, Limnebius cordobanus, Limnebius gerhardti, Ochthebius delga doi y Aphelocheirus murcius.
3) Norte. Se trata de especies que se distribuyen por el norte peninsular y cuya presencia en Albacete necesita confinación: Hydrochus interruptus (coleóptero) y Velia bertrandi (heteróptero).
4) Sur. Tienen su distribución restringida al sur, sureste y, excepcionalmente, suroeste de la península Ibérica. Todos son coleópteros: Deronectes depressicollis, Hydrochus ibericus, Hydrochus noo reinus, Hydraena manfredjaechi, Hydraena bolivari, Hydraena servilia, Limnebius hispanicus, Ochthebius bellieri, Ochthebius albacetinus, Ochthebius glaber y Ochthebius tudmirensis.
5) Exclusivos. Únicamente encontrados en la provincia de Albacete. Todos son coleópteros: Hydraena mecai, Limnebius millani y Ochthebius irenae.
Para todos ellos se presenta su localización provincial en cuadrículas UTM de 10 x 10 km e información de sus rasgos ecológicos más característicos.
Por último, se identifican los centros de endemicidad y de riqueza de especies como áreas críticas de biodiversidad.
