Este artículo nos presenta el programa Educación Responsable que la Fundación Botín está llevando a cabo en Cantabria desde 2004 con 100 centros, 776 docentes y 15.000 alumnos y sus familias para apoyar y facilitar el crecimiento saludable de niños y jóvenes en sus vertientes física, emocional, intelectual y social. Una estrecha colaboración con la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria; participación y compromiso voluntarios; iniciativa conjunta de escuela, familia y comunidad; acompañamiento y seguimiento cercano; viabilidad y transferibilidad, así como acciones evaluadas con orden y rigor son los ingredientes de este innovativo programa que apuesta porque la educación emocional y social forme parte indiscutible y plenamente integrada en el currículo escolar. Las evaluaciones externas realizadas por la Universidad de Cantabria concluyen que Educación Responsable ha conseguido mejorar de forma significativa la inteligencia emocional y la asertividad del alumnado, reduciendo al mismo tiempo sus niveles de ansiedad, y logrando una correlación positiva entre clima escolar y rendimiento académico. era estudiar aquello que amenaza el bienestar del ser humano, llevando a centrar el interés en déficits y problemas. Las personas que desarrollan sus fortalezas y capacidades, mejoran su calidad de vida y previenen la aparición de trastornos. Además, la percepción de eficacia y bienestar, aumentan al mismo tiempo que la motivación. Es por eso que nos parecen relevantes y porque aumentan la sensación de alegría. Los padres y maestros tenemos una gran responsabilidad de enfocarnos más hacia las capacidades de nuestros hijos y alumnos, que hacía los déficits y limitaciones. Es un estilo que se aprende, y así ellos también ellos serán más hábiles en reconocer, utilizar y desarrollar sus fortalezas en el presente y también en el futuro.
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