El primer objetivo del uso de un anticonceptivo hormonal (AH) es el de evitar un embarazo.
Pero cada día se conocen mejor los efectos beneficiosos no contraceptivos del mismo.
El uso de AH se asocia a un menor sangrado menstrual, a una mejoría de la dismenorrea, del síndrome premenstrual y del dolor ovulatorio intenso. Así mismo, protege de la enfermedad inflamatoria pélvica, tiene un efecto protector sobre la densidad mineral ósea y efectos beneficiosos sobre la piel (acné, hirsutismo). También protege del riesgo de padecer cáncer de ovario, cáncer de endometrio y de colon.
Estos beneficios son tan importantes que, algunas veces se prescriben exclusivamente por estas razones. Y además resulta interesante conocer estos efectos beneficiosos tanto los profesionales sanitarios como las mujeres.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados