En este trabajo se presentan cuatro cirugías de hernia perineal en el perro, realizadas con una combinación de tres técnicas: elevación del músculo obturador interno, interposición de una malla de polipropileno y transposición con rotación del músculo glúteo superficial. Con esta combinación de técnicas intentamos asegurar el menor índice de recidivas a largo plazo posible. También realizamos una aproximación a la controvertida etiología de este problema, todavía no suficientemente aclarada, pero sí orientada hacia una predisposición genética que alteraría la función de los receptores androgénicos en la musculatura del diafragma pélvico. Discutimos las alternativas quirúrgicas y tratamientos complementarios como la orquiectomía.
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