Las plantas fotovoltaicas despiertan la codicia de las bandas criminales. la bajada del precio de los módulos ha convertido el cable de cobre que contienen las instalaciones en su objetivo. Existe mucha alta tecnología disponible para protegerse, ya no solamente del robo, sino también de las falsas alarmas. Una nueva normativa entrada recientemente en vigor sanciona duramente a los que hagan acudir en vano a los cuerpos de seguridad del Estado.
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