Por segunda vez en veintisiete años, Japón ha registrado un déficit comercial en octubre pasado. Al depender en gran medida de las exportaciones, sufre de lleno la entrada en recesión de Estados Unidos y de Europa. Entre los más afectados: los trabajadores precarios de la industria, especialmente en el sector automovilístico. Al igual que los "jóvenes en prácticas" extranjeros. En un principio, éstos se sintieron atraídos por la isla en búsqueda de perfeccionamiento pero a menudo sirven de mano de obra barata. Historia de estos desengaños.
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