Resumen de Inhibición directa de la renina y protección de órganos diana. Más allá del descenso de la presión
Vicente Bertomeu González, Mariano de la Figuera von Wichmann, Carlos Calvo Gómez
El bloqueo a distintos niveles del sistema renina-angiotensina ha demostrado importantes beneficios en la reducción de la morbimortalidad cardiovascular. La introducción en el arsenal terapéutico del aliskiren, un inhibidor directo de la renina, ha abierto una nueva vía para el tratamiento de la hipertensión y la protección de los órganos diana. El aliskiren tiene una eficacia antihipertensiva similar a la de otros fármacos antihipertensivos, con un perfil de seguridad y tolerabilidad comparable al del placebo, incluido el tratamiento de hipertensos diabéticos obesos y pacientes de edad avanzada, con reducción persistente de la presión arterial y una supresión prolongada de la activación de renina plasmática, incluso tras la retirada del fármaco. Los datos disponibles de diferentes estudios clínicos y experimentales indican que el aliskiren es capaz de proteger contra el daño de los órganos diana, especialmente en pacientes diabéticos. Los prometedores resultados de los ensayos clínicos realizados con aliskiren en pacientes hipertensos, que evalúan marcadores de daño orgánico renal y cardiaco, refrendan la importancia de inhibir el sistema renina-angiotensina-aldosterona cuando se busca reducir la morbimortalidad cardiovascular y renal. El actual programa de ensayos clínicos ASPIRE HIGHER está diseñado para evaluar indirecta (acciones sobre diferentes marcadores) y directamente (efectos en diferentes órganos diana) la capacidad organoprotectora del aliskiren; los resultados que se obtengan definirán el papel de la inhibición directa de la renina en el tratamiento de la hipertensión arterial y, sobre todo, en la reducción de la morbimortalidad cardiovascular.
