Los árboles se autodiseñan y modifiban su forma de tal modo que todas sus células estén somoetidas a la misma tensión. Hacerlo así incrementa su seguridad y reduce la posibilidad de caer y morir. Los organismos mejor adaptados, aquellos que han logrado reducir las concentraciones de tensiones, las zonas en las que las células están sometidas a mayores esfuerzos, son los que vemos en la actualidad.
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