A través de tres novelas andinas, Huasipungo (1934), Yawar fiesta (1940) y Dos muertes en una vida (1971), el autor analiza el despojo a que han sido sometidos los indígenas de las altiplanicies de Ecuador, Perú y Bolivia. Despojo que comenzó por la tierra, y que culminará, hasta nuestros días, con el arrebato de bienes culturales, costumbres y tradiciones. Sin entrar en un análisis a fondo de esta "modernización" el articulista registra descripciones reveladoras sobre la vida de las etnias andinas, contrastándola con las posiciones de hacendados e intermediarios mestizos, que usufructúan de su posición. Rescata así tanto los valores de una imagen literaria consagrada, como los contrastes de una realidad que se prolonga ya hace casi cinco siglos.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados