La vitamina D tiene 2 formas principales, D2 y D3. La forma D3 puede sintetizarla el propio organismo, pero para ello es necesaria la exposición a los rayos UV. La vitamina D es la reguladora del calcio, que es necesario para muchas funciones corporales. Su carencia produce raquitismo, mayor riesgo de cáncer y fallos en las respuestas antimicrobianas, además de estar relacionada con el envejecimiento. Esta vitamina no se encuentra de manera significativa en muchos alimentos, por ello debemos regular nuestra alimentación y exposición solar diaria, para mantener y mejorar nuestra salud.
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