Algunos filósofos de la mente han defendido la idea de considerar la mente como otra característica fundamental de la realidad, además de las propiedades físicas. De ahí que la mayoría de ellos sean propiamente dualistas. Sin embargo, algunos de ellos son pansiquistas. En este artículo sostendré que ser propiamente un dualista implica, en esencia, ser pansiquista.
Incluso, si el pansiquismo aborda ciertas dificultades relacionadas con el problema de la conciencia de manera muy elegante, éstas permanecen inmodificables. Siendo partidario del carácter fundamental de la mente, defenderé la idea de que sólo mediante una revisión radical de la metafísica el pansiquista podrá evitar tales problemas y, en consecuencia, que debe adoptar el idealismo leibniciano.
Some philosophers of mind have argued for considering consciousness as a further fundamental feature of reality in addition to its physical properties.
Hence most of them are property dualists. But some of them are panpsychists. In the present paper it will be argued that being a real property dualist essentially entails being a panpsychist. Even if panpsychism deals rather elegantly with certain problems of the puzzle of consciousness, there´s no way around the composition problem. Adhering to the fundamentality claim of the mind, it will be shown that only a radical revision of metaphysics will allow the panpsychist to avoid these troubles, and hence that a panpsychist must adopt Leibnizian idealism.
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