El 2 de julio de 1961, impulsado por el alcoholismo y una profunda depresión ante una vida que no era más que un triste reflejo de los días de gloria, el escritor Ernest Hemingway se pegó un tiro con su escopeta de caza. Cuando recibió la noticia, el torero Juan Belmonte susurró "Bien hecho, amigo mío", un año antes de seguir sus pasos.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados