Aunque no tan nuevo como parece, el branded entertaimment (o contenido de ocio ligado a la marca está poco a poco calando en la estrategia de los anunciantes. La pérdida de la eficacia de la publicidad tradicional en televisión está motivando que las agencias conciban y desarrollen proyectos en los que las marcas son las que crean los contenidos con el objetivo de entretener al consumidor y conseguir entrar (y quedarse) en su corazoncito. The hire, la campaña de cortos de BMW ofrecidos por internet (13 millones de visionados y 2 millones de personas registradas) marcó un hito que otros quieren repetir.
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