Kevin Roberts encuentra razones sobradas para seguir entusiasmado al frente de Saatchi, entre ellas la calidad de outsider que él considera mantiene la agencia. Roberts, una de las figuras más visibles del sector a escala internacional, prolífico conferenciante y autor, considera que su labor es ahora inspirar más que liderar, está muy satisfecho del desempeño de su agencia en 2011 y tiene respuestas contundentes ("Las marcas han muerto", por ejemplo) para cualquier asunto que se le plantea, desde el papel de las empresas y las marcas en la sociedad actual hasta el afán de estar conectados, pasando por la situación y perspectivas de España, la creciente importancia de lo local, el nuevo capitalismo, Apple, su concepto lovemarks y el miedo en las empresas.
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