Hemos visto ya que para ejercer libremente en la Colonia, era indispensable presentar credenciales de protomédico, nombramiento que hacía el Virrey o la Corte Española; éste entre otros oficios, obligaba a desempeñar el de las extracciones dentarias y para tal cupo ser el primero que ejerciera en Santafé en 1564 Fray Pedro Pablo de Villa mor, unidad sobresaliente del Hospital de San Pedro (situado en el lugar que hoy ocupa la Sacristía de la Catedral Primada y que fue fundado en el mismo año). Más tarde arribó a nuestro territorio (en 1639), el doctor Diego Enríquez, quien venía a cumplir las mismas disposiciones y oficios del anterior. Para hacer extracciones y algunos reducidos e imperfectos trabajos dentales, éste autorizó a algunos curanderos, entre los que figuró como más hábil, don Pedro Fernández de Valenzuela
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