El artículo busca entender el gran poder que la sensibilidad de Silva obtuvo sobre su ciudad natal, explorando algunos de los principales sentimientos que le permitieron alcanzar un lugar paradigmático dentro de los linderos auto-reflexivos de Guayaquil. Propone que varias generaciones de guayaquileños han utilizado a Silva como un espejo de múltiples niveles para reflejar sus complicadas imágenes de ausencia, pesadillas coloniales y las formas institucionales de un rechazo civilizador.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados