Resumen de No todos los homosexuales están de fiesta: El reconocimiento de derechos a gays y lesbianas no evita su persecución en no pocos países
Se acerca la fecha de la celebración del Día del Orgullo Gay, un evento que ha adquirido grandes proporciones en nuestro país y que, cada año, profundiza en su espíritu transgresor y festivo –lo que ya comienza a ser criticado por varios colectivos que desean un planteamiento más reivindicativo–. Sin embargo, buena parte de los integrantes de este colectivo en el mundo continúan perseguidos por su opción sexual, que es considerada como delito en los códigos penales de 78 países –en seis de ellos, se les impone la pena de muerte–. Incluso en los Estados con mayor tolerancia, la discriminación continúa bajo diversas y disimuladas formas. Sus matrimonios apenas están aceptados en una veintena de países, y la capacidad para la adopción sólo está reconocida en 15. El reciente triunfo en referéndum de la legalización de las bodas homosexuales en la católica Irlanda ha puesto, de nuevo, el debate en la agenda europea.
