"La imagen para la palabra o la palabra para la imagen".
Sería un enigma muy fácil de resolver puesto que ambas cosas pueden realizarse.
Según Arnheim, "Un grupo de palabras, aunque cada una de ellas sea amplia y genérica, delimita el significado del conjunto hasta que el escritor llega a trasmitir, si así lo desea, la imagen de un arce plantado en el jardín de una casa con las hojas amarillentas que caen de las ramas mientras sopla un viento otoñal" (1992:62).
Lo contrario se podría decir de una imagen la cual puede provocar diferentes sentimientos en cada individuo que según sus experiencias y conocimientos puede inspirar su expresión verbal de manera imaginativa.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados