Tras la ruptura de relaciones diplomáticas entre Riad y Teherán –inmediatamente después del asalto a la embajada saudí en Irán–, el último hito de la escalada es la acusación persa contra el ejército saudí de haber atacado su sede diplomática en Yemen –donde las fuerzas del rey Salman bin Abdelaziz llevan meses atacando a los chiíes de ese país–. La tensión entre las dos potencias regionales tiene mayor alcance que el bilateral ya que pone en serio peligro los intentos de una solución negociada del conflicto sirio.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados