Algunos santos como el legendario Amaro, San Miguel Arcángel, San Gregorio, San Gil Abad, San Jerónimo, San Antonio Abad, San Cristóbal, Santos Julián y Basilisa, San Bartolomé, San Huberto o San Amador (además de San Francisco, Santo Domingo, Santa Clara, Santa Catalina, Santa Bárbara, Santa Margarita o Santa Quiteria) resultaron invocados asiduamente a la hora de afrontar el último viaje. Entre los siglos XIV y XVI aparecerán abundantemente en los testamentos y en la iconografía funeraria. A la derecha de la Adoración del Cordero Místico del políptico de Gante de los hermanos van Eyck aparecen varios santos ermitaños acompañando a San Antonio Abad y otros peregrinos que hacen lo propio con San Cristóbal.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados