Cuando escribir era para mí afán de narrar, decir, comunicar, uno de los tantos modos fisiológicos, nunca tuve problemas literarios. Solo mucho tiempo después, en el trajín de los días y del vagabundaje, entre la práctica médica y las necesidades, ciudadano de un país y habitante del mundo, surgió la urgencia de definir la postura entre la vida y el arte. Vida y arte. He aquí los dos polos dialécticos de mis problemas como escritor. Hay quienes definan esta contradicción oponiendo la realidad a la literatura.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados