No existe en ninguna literatura, afirma un critico, un cuadro de poetas tan asombrosos como el que presenta Inglaterra durante el Ciclo Isabelino, y cuyo representante legal es William Shakespeare. Solo el genio de este hombre ha podido hacer sombra al grupo de escritores de primera magnitud, que brillaron durante medio siglo como inextinguibles fuegos de artificio.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados