Tradicionalmente, en Hollywood solamente han tenido cabida dos tipos de actores latino-americanos: los "guaperas" (a ser posible, con habilidades para el canto y la danza), capaces de engatusar en la pantalla a damas sedientas de experiencias amorosas más o menos exóticas, o los marcados y viriles rasgos raciales cuyas únicas posibilidades artísticas pasaban por convertirse en sangrientos y pintarrajeados indios, malvados pistoleros o gángsters del más dicerso pelaje.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados