Aunque ha habido éxitos en la respuesta de primera emergencia tras desastres repentinos como el tifón Haiyan, crisis como la del ébola o emergencias crónicas como Sudán del Sur también muestran las grandes limitaciones de la configuración actual del sistema humanitario global. Esta es una de las principales conclusiones del informe Estado del Sistema Humanitario Mundial, que en su tercera edición recomienda una revisión del diseño actual de la acción global ante este tipo de situaciones. Porque, como dice John Mitchel, director de la red Alnap, que ha elaborado el documento, “estamos intentando hacer con una calculadora el trabajo de una computadora”. A continuación reseñamos las principales conclusiones y las opciones para identificar y subsanar sus deficiencias en la Cumbre Mundial Humanitaria que se celebrarán los próximos 23 y 24 de mayo en Estambul (Turquía).
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