Resumen de La arsenamina en las pulpitis necrosantes.
El anhídrido arsenioso aplicado a la pulpa dentaria no actúa del mismo modo en todos los casos, aunque se siga la misma técnica. La diferencia depende del estado en que se encuentre la pulpa en el momento de sellar la curación arsenical. Si lo aplicamos ante una pulpitis necrosante parcial provocada por inflamación crónica, se observan a las pocas horas síntomas congestivos del pericemento que hacen pensar que se ha conseguido insensibilizar la pulpa completamente y que se ha provocado una pericementitis química. Pero realmente no se ha actuado sobre el nervio, que continúa tan sensible como en el momento en que hicimos la aplicación arsenical: es decir, no ha actuado sobre el contenido radicular y, por tanto, mal ha podido provocar la pericementitis química por propagación. Si nos vemos obligados a emplear el anhídrido arsenioso como cáustico en las caries de tercer grado, debemos provocar con anterioridad la lisis de la parte mortificada (si la hay) en la pulpa, para evitar contratiempos.
