Los remedios homeopáticos deben ser administrados separadamente, no asociados entre sí como se hace en alopatía. En su aplicación es fundamental tener en cuenta el tipo de temperamento que posee el paciente, ya que puede ser linfático, sanguíneo, bilioso, melancólico y nervioso. Los siguientes medicamentos y sus aplicaciones son descritos en este artículo: aurum foliatum (oro), borax veneta (bórax), caléndula, chamomilla (camomila), chelidonium, cistus canadensis, cóffea, conium mac, eucalyptus (eucalipto), gymnocladus canadensis, kreosotum, mercurios (mercurio), phósphorus (fósforo) y plantago.
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