En este artículo el autor parte de un breve análisis del fenómeno de la postmodernidad, como un existenciario colectivo que incide en el modo de pensar del hombre contemporáneo. Argumenta su discurso desde la antropología semiótica, siendo el lenguaje y el signo un significante importante para la cultura de hoy. Desde este código ha hablado Dios a los hombres, y es justamente allí, desde donde es posible entender al hombre como interlocutor de Dios en la historia. El autor acude al lenguaje como la mayor expresión del hombre, constatando en el sujeto humano una estructura semiótica como parte de su onticidad.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados