Mariano Fernández Constantinides
En este trabajo nos preguntamos por las condiciones de producción mediáticas que marcan la intervención en el espacio público de dos tipos de discursividad social, el discurso político y el discurso periodístico. Postulamos que, bajos estas mismas condiciones, y a pesar de vincularse a emplazamientos institucionales funcionalmente diferenciados, estos dos discursos están sometidos a un principio regulador común: el contacto con los colectivos que suelen ser identificados como “público”, “audiencia”, ciudadanía”. Esa interfaz periodismo/política es uno de los efectos problemáticos de la mediatización. Supone una disputa en el nivel de la gestión de las identidades colectivas, e implica la intervención sobre el principio formal de la representación en el sistema democrático: el periodismo es una institución que suele asumirse como representante, sin estar sujeto a las responsabilidades que emergen de un contrato de representación. Ese “hablar en nombre de” es un fenómeno complejo, no atribuible al capricho de un individuo, o a una deformación profesional. En esa línea, proponemos considerar la tesis de Latour, para quien ese “hablar en nombre de” es un principio de politicidad presente en todos los discursos sociales.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados