A pesar del trascurrir de la Historia y de los avances en términos científicos y culturales, la desigualdad entre hombres y mujeres continúa siendo una constante en todas las sociedades. Con independencia de grado de desarrollo, la discriminación de la mujer por razón de su sexo y el ejercicio de la violencia contra ella y por el mismo motivo es una constante en todas las partes del mundo. Quiero analizar en este artículo la incidencia de las grandes religiones patriarcales en el desarrollo y perpetuación de los roles sociales y en la concepción de la mujer como ciudadana de segunda, enfrentada a desafíos y dificultades diarios por su condición de género a través de dos modelos aparentemente opuestos: el Occidental y el Oriental. En un primer momento, expondré la situación de las mujeres en un país aconfesional como es España y posteriormente, entraremos a analizar las condiciones de vida de las mujeres nacidas en la República Islámica de Irán.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados