Tras haber perdido dos guerras contra el Ejército ruso, la guerrilla chechena cuenta hoy en día con una mayoría de yihadistas. Como respuesta, el poder local, aliado de Moscú, exalta la tradición sufí y la poligamia. Esta manipulación de la religión no ha impedido el recrudecimiento de los atentados. En detrimento del Kremlin, que instaló este régimen para que mantuviera el orden.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados