Marisol Montellano Ballesteros
Restos de un saurópodo titanosaúrido fueron descubiertos en la zona de Altares, en el noreste del Estado de Chihuahua, México. El material fósil proviene de rocas que han sido correlacionadas ya sea con la parte continental más superior de la Formación Aguja o la parte continental más inferior de la Formación Javelina. El material incluye los cuerpos de cuatro vértebras caudales posteriores y son identificados como pertenecientes a la familia Titanosauridae con base en la condición fuertemente procélica. Este es el primer registro de la familia para el país.
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