Jorge Cañizal Berini, Jorge Castro González, Almudena da Costa García, César Sagaseta Millán, Pedro R. Sola Casado
La pista del aeropuerto de A Coruña se ha ampliado en una longitud de unos 400 m, lo que ha llevado a un relleno adicional de unos 35 m de altura máxima, completado en el año 2015. Se trata de un pedraplén de granito con taludes 1,4(H):1(V).
El terreno de cimentación son esquistos de grado de meteorización II-III, con una cobertura de suelos de 5 a 12 m de espesor global, y rellenos antrópicos. Los asientos admisibles post-constructivos se fijaron en 0,20 m. Los análisis previos indicaron que ese límite se excedería en un 30% del área ocupada por el relleno, con valores máximos en torno a 0,80 m. Ello llevó al refuerzo del terreno en dicha zona con columnas de grava, y la excavación y sustitución de las capas superficiales de suelos inadecuados.
Se instaló instrumentación, con medición remota de asientos de la base del relleno, e inclinómetros al pie de los taludes.En la comunicación se describen los aspectos más notables de la construcción, que duró unos 2 años, y los movimientos medidos y su evolución. También se comentan los problemas en la selección de materiales y la influencia de instalaciones cercanas.
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