Hay varias etapas en la ejecución de una obra de refuerzo y/o tratamiento del terreno con jet grouting. En primer lugar se ha de estudiar los condicionantes tanto del terreno como de la obra para así poder diseñar el tratamiento del terreno que mejor se adapta a estos condicionantes. Antes de la ejecución del jet grouting se debe hacer un campo de pruebas instrumentado, utilizando registradores de parámetros en los equipos para así poder calibrar el diseño y ajustar los parámetros del tratamiento a las condiciones encontradas in situ. Una vez realizado esto, durante la ejecución de la obra se debe llevar a cabo en todo momento un exhaustivo control de la misma en función los parámetros del tratamiento y de sus manifestaciones en su zona de influencia. Por último, se debe realizar un control de los resultados del jet grouting por medio de la ejecución de ensayos tanto in situ como de laboratorio para verificar que el objetivo de mejora previsto en diseño se ha alcanzado y que el terreno está listo para su puesta en servicio.
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