José María Dusmet (1869-1960) fue un reconocido entomólogo español, especialista en macrohimenópteros, que desarrolló su labor vinculado al Museo Nacional de Ciencias Naturales aun sin ocupar oficialmente puesto alguno. En 1925 un joven universitario de Valencia, Modesto Quilis (1904-1938), contactó con él para solicitarle consejo para progresar en su afición por los insectos. A partir de ese momento, y durante más de diez años, Dusmet fue iniciando a Quilis en la práctica entomológica profesional. Así, le asesoraba en la adquisición de ejemplares y bibliografía, al tiempo que le facilitaba contactos entre especialistas nacionales y extranjeros y le resolvía dudas de nomenclatura y taxonomía. Además, le inició en un cierto ethos caballeresco de la práctica naturalista. Con el tiempo, Quilis logró una inserción profesional como entomólogo especialista en microhimenópteros y control biológico de las plagas del campo, iniciando una prometedora carrera que frustró su temprana muerte. Las cartas que ambos intercambiaron, conservadas en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, ponen de relieve los detalles de un magisterio en la distancia intensamente cargado de admiración mutua y cultivo de la amistad.
José María Dusmet (1869-1960) was a renowned Spanish entomologist. He specialized in big Hymenoptera, developing his tasks at the National Museum of Natural Sciences in Madrid, despite the fact he never occupied an official position. In 1925, Modesto Quilis (1904-1938), a student from Valencia, wrote Dusmet in order to obtain advice on how to make progress in entomological studies. From that moment and for more than a decade, Dusmet gave Quilis guidance to the practice of professional entomology in a diversity of aspects, e.g., acquisition of specimens and bibliography, contacts with other colleagues in Spain and other countries, or questions on taxonomy and nomenclature. He also introduced his young disciple in a certain kind of scientific ethos, based on a chivalric sense of the relationship between natural history practitioners. Some years went by and Quilis obtained an official job as entomologist specialized in microhymenoptera and pest control. His promising career was cut short by his premature death. Exchange letters between both naturalists have been consulted at the Archive of the National Museum of Natural History. This correspondence highlights the details of a sort of teaching-in-distance, pervaded by friendship and mutual admiration.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados