Objetivo: Analizar las sedaciones que se realizan en pediatría, fuera del área quirúrgica. Esto siempre es un reto para el anestesiólogo pero más si los pacientes son niños. Creemos que una de las claves es tener protocolizados los fármacos a utilizar y sus vías de administración, la monitorización, tener una enfermera dedicada a ayudar al anestesiólogo y por supuesto seleccionar muy bien los procedimientos; de hecho, a pesar de los muchos trabajos que hay publicados sobre sedación, muchas de ellas fracasan por no estar bien indicadas o porque el personal que la realiza no es un anestesiólogo. Nuestro método de trabajo fue: -Hacer una búsqueda bibliográfica sobre un fármaco básico: propofol. -En cuanto a los procedimientos a realizar bajo sedación en niños, contactamos con varios hospitales de gran reconocimiento en el mundo de la Anestesia Pediátrica con una lista de dichos procedimientos. Los hospitales consultados fueron: Children's Hospital de Pittsburgh, Cleveland Clinic Foundation, Departamento de Anestesia Pediátrica de la Universidad de Varsovia, Children's Hospital de Colonia (Alemania), Sick Great Ormond Street de Londres; todos coinciden en seguir los siguientes pasos: baño del niño quemado, radioterapia, resonancia nuclear magnética (RNM), tomografía axial computerizada (TAC) y tomografía de emisión de positrones (PET). La ecocardiografía en niños pequeños se realiza la mayor parte con hidrato de cloral, bien por vía oral (85%) o rectal. Material y método: Se revisa literatura reciente mediante buscadores de internet, destacando que la mayoría emplean propofol; se cruzan palabras claves: propofol and children, propofol and infants y propofol and neonates. Conclusiones: Los procedimientos de sedación en niños necesitan como otro tipo de anestesia los siguientes documentos: 1. Consentimiento informado. 2. Ayuno, según edad. 3. Acceso venoso disponible. 4. Monitorización adecuada según procedimiento.
Objective: To review the sedations that are performed in pediatric care outside the surgical area. This is always a challenge for the anesthesiologist, but particularly when the patients are children. We believe that the keys are: a protocol that establishes the drugs to be used and their routes of administration, monitoring, appointment of a nurse for the support of the anesthesiologist and, of course, a very good selection of the procedures. In fact, despite the many studies that have been published about sedation, many of these fail because the indications are not appropriate or because the person that performs them is not an anesthesiologist. Our working method has been the following: -We carried out a literature search of a basic drug: propofol. -In order to establish the procedures that have to be conducted under sedation in children, we contacted several hospitals with a recognized prestige in Pediatric Anesthesia with a list of procedures. The hospitals consulted were: Children's Hospital de Pittsburgh, Cleveland Clinic Foundation, Department of Pediatric Anesthesia of the Varsaw University, Children's Hospital of Colonia (Alemania ) and Sick Great Ormond Street of London. All of them agreed on the need of sedation for the following procedures: bath of burned children, radiotherapy, nuclear magnetic resonance (NMR), computerized axial tomography (CAT), positron emission tomography (PET). The echocardiography in small children is mostly performed with chloral hidrate, either orally (85%) or rectally administered. Material and method: We reviewed recently published literature with Internet search tools, in most cases using the propofol word and crossing-over the key words: propofol and children, propofol and infants y propofol and neonates. Conclusions: Sedation procedures in children require, such as any other type of anesthesia, the following: 1. Informed consent. 2. Fasting, depending on age. 3. Availability of a venous access. 4. Appropriate monitoring depending on the procedure.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados