Madrid, España
En torno al año 2000 se ha entrado en una tercera etapa en el proceso de formación de la “España inmigrante”, porque la cuestión migratoria se ha “institucionalizado” (Cachón,2002). Tras una segunda etapa que vino marcada por el desajuste en el mercado de trabajo que actuó como el motor que puso a España en el mapa migratorio internacional como un posible país de destino, desde 2000 los flujos aumentaron notablemente y se diversificaron; pero lo más significativo son los cambios en la opinión pública, los conflictos ligados a la inmigración que van surgiendodesde ese año, los debates políticos sobre la cuestión y los intentos de construir un sistema de gestión de los flujos migratorios y de afrontar los retos de la ciudadaníay la integración con los inmigrantes. En esta etapa la inmigraciónse ha consolidado “como cuestión política, incluso como una de las cuestiones políticas clave” (Lucas, 2002). Esta tercera etapa tiene dos períodos muy diferenciados que están relacionados con el cambio de gobierno que se produjo en 2004: el nuevo Reglamento de extranjería de diciembre de 2004 (y la“normalización” de 2005) y el Plan Estratégico de Ciudadanía e Integración 2007-2010 (cuyos preparativos comenzaron en diciembre de 2004, aunque no se haya aprobado hasta febrero de 2007).
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