El principal esfuerzo de los veterinarios en el manejo de las heridas sucias e infectadas consiste en promover un lecho de granulación vascular sano, independientemente del método elegido para el cierre de la herida. Entre las diferentes herramientas disponibles encontramos el ácido hipocloroso en forma de hidrogel, que ayuda en las heridas necróticas a estimular la desbridación autolítica.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados