La evaluación de proyectos de cooperación para el desarrollo: una crítica abierta, un reto sin fin

• Autores: Silvio Calgaro Neto, Alberto Perez
• Localización: Crisis y cambio. Propuestas desde la Sociología: actas del XI Congreso Español de Sociología. Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Ciencias Políticas y Sociología. 10-12 de julio de 2013 / coord. por Heriberto Cairo Carou, Lucila Finkel Morgenstern, Vol. 1, 2014, ISBN 978-84-697-0169-0, págs. 1263-1272
• Idioma: español
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• Resumen

  • La idea de desarrollo ha estado siempre asociada al sentido del cambio continuo, a la transición desde unas situaciones a otras, supuestamente, mejores. Procesos deliberados de cambio, los cuales son provocados y gestionados (impulsados) mediante distintas matrices perceptivas que indican los sentidos de esta búsqueda de mejora, tal como plantea Robert Chambers (2004:1) “The eternal challenge of development is to do better”. El carácter polisémico del desarrollo hace que a él sean vinculadas acciones y discursos diversos. Por ello, se hace cada vez más necesario conocer, analizar y difundir con mayor detalle los procesos de desarrollo por parte de administraciones públicas u organizaciones civiles que deben justificar socialmente la utilización de recursos en estos procesos. La cooperación internacional al desarrollo (CID) es una de las más antiguas experiencias de construcción organizacional para el impulso de procesos de desarrollo enmarcadas en lo que se denomina “desarrollo institucionalizado” (Palenzuela, 2011). En este ámbito, la modalidad de proyectos es la herramienta más utilizada para la promoción de procesos de desarrollo. Esta presenta una serie de elementos y características que le confieren plasticidad y adaptabilidad al complejo diálogo orientado al cambio social, del mismo modo es reconocida por su buena capacidad estratégica y de planificación, por su transparencia, racionalidad, libertad, coherencia, control y capacidad de promover la participación de distintos actores (Cohen & Franco, 1993; Armani, 2001). En virtud de tales reconocimientos y de los actuales niveles alcanzados por el sistema internacional de cooperación parecería obvia la existencia de una evaluación de proyectos más detallada. Pero aparentemente no existe a nivel internacional una metodología de consenso para la evaluación de la CID. Esta comunicación pretende establecer un análisis crítico sobre el sistema de evaluación de los proyectos de cooperación internacional enfatizando la necesidad de hacer corresponder esta evaluación con el carácter polisémico del desarrollo. Desde esta perspectiva se abordan algunas de las características actuales de este sistema de evaluación que limitan dicha correspondencia. Por un lado, la naturaleza cuantitativa de los indicadores destinados a registrar la ejecución de estos proyectos y con los que la evaluación queda concentrada principalmente en los aspectos económicos y materiales. Por otro lado, la aplicación de la evaluación cualitativa que estos procesos requerirían se ve obstaculizada por la subjetividad inherente a la noción de calidad. De tal modo vemos como la evaluación de los proyectos de cooperación al desarrollo, ha sido, al igual que el propio desarrollo, un reto inalcanzable hasta el momento. Sin embargo, el contexto actual marcado por la profunda crisis económica y la reducción drástica de los presupuestos para AOD en España, ha inducido, forzosamente, un nuevo y profundo periodo de reflexión sobre los modos, medios y metodologías del sistema en el que también se aportan nuevas perspectivas sobre su evaluación.