Resumen de Cada día más coquetos
Nada que ver con los guaperas que viven, siempre por exigencias del guión, por y para su imagen. Los nuevos consumidores de cosmética, maquillajes incluídos, son hombres de la calle. Y no sólo compran lo que tienen que comprar (lociones, geles, aftershaves, aguas de colonia, tratamientos para el pelo, bronceadores...), sino que además, y después de haber hurgado mucho tiempo en el neceser de la novia o la señora (y haber destapado muchos botes), entran sin complejos en la perfumería o la farmacia y piden la última crema hidratente con color o una mascarilla astringente. Para él o para ella, la mejor cosmética está en la mejores marcas: tanto los productos que, descendientes de muchos perfumes de éxito, desembarcan en los cuartos de baño convertidos en líneas de higiene, hidratación o afeitado, como los de carácter unisex, que a pesar de estar pensados para las mujeres pueden, por su composición, textura u olor neutro, ser utilizados perfectamente por hombres de manera regular. Estas modernas líneas han seducido a los coquetos de nuestro tiempo con sus fórmulas prometedoras y sus envases y texturas llenos de sensualidad. Adiós a la ducha como rutina. Ni un minuto más esas pieles grises, resecas y sin vida.
