Cuando la ciencia de la conducta salva vidas
- Autores: Roberto Polanco Carrasco
- Localización: Cuadernos de Neuropsicología, ISSN-e 0718-4123, Vol. 14, Nº. 1, 2020, págs. 8-9
- Idioma: español
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Resumen
Si algo nos ha enseñado el coronavirus (COVID-19), una vez más, es que las políticas y sistemas de salud, y dentro de ello todo lo que involucra la precaria situación de la salud mental en general, es que las capacidades de la psicología para poder abordar esta enfermedad han sido francamente subvaloradas. En algunos casos simplemente descartados por ciertas instituciones que se vinculan a los gobiernos de turno o incluso, por qué no decirlo, hasta por los propios actores de la psicología, muchos de los cuales se han visto limitados en sus funciones.
Acaso no resulta curioso que una simple búsqueda de información experta, la que debería poder hacer cualquier estudiante de último ciclo de su carrera universitaria, puede encontrar sólida y variada cantidad de conocimientos que existen desde hace años respecto a la importancia de ciertas conductas para el cuidado de la salud física y mental. Entre estos conocimientos se sabe, por ejemplo, de las consecuencias nocivas de una cuarentena prolongada, tanto en niños cuando se interrumpen la interacción con sus pares, como en adultos cuando se provoca un asilamiento afectivo obligado por la situación, temáticas ampliamente investigadas por nuestra disciplina.
