Los relojes atómicos ofrecen la mayor precisión posible, que en los más avanzados llega a un segundo de diferencia cada 3.700 millones de años. En la navegación espacial no hace falta llegar a ese extremo, pero es importante conseguir una elevada precisión, especialmente para desplegar sistemas de posicionamiento global (GPS) en otros planetas y satélites para los robots y los astronautas que los recorran. El reto principal es conseguir reducir su tamaño para poder equipar las naves espaciales y la NASA ha logrado reducirlo hasta el tamaño de una tostadora.
NASA is testing a prototype atomic clock known as DSAC aimed at improving the accuracy of navigation in space and allowing global positioning and satellite systems to be deployed on other planets. The novelty of this apparatus is its small size, a necessity when it comes to equipping space vessels.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados