Felipe González parece más humano desde que está en la oposición: come con los demás en el comedor del Congreso y charla con tranquilidad con sus compañeros de partido. Mientras, surge una sombre sobre su liderazgo, la del irónico y brillante José Borrell, ex ministro de Obras Públicas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados